Eggun – Espíritus de los ancestros
Eggun es el nombre que representa el culto a los espíritus de los ancestros o antepasados en la religión yoruba. Estos ancestros pueden ser espíritus de difuntos cercanos, o de babalawos y santeros desencarnados, incluso de aleyos o iniciados que han sido consagrados a Oduduwa.
Para los fieles de la religión yoruba, los muertos deben recibir atención especial, se honran específicamente, incluso antes que los orishas, ya que los eggun corresponden a los espíritus de los ancestros del devoto, y estos pueden ser difuntos familiares, babalawos mayores fallecidos, por tanto, se les adora por ser espíritus que vivieron y pasaron de esta vida para ser mensajeros entre ambos mundos, con los orishas, y para asistir a los devotos de la religión. De esta manera, los Eggun tienen el poder de estar en los dos planos, el terrenal y el espiritual.
Algunas sociedades del antiguo Imperio Yoruba practicaban el culto a los eggun de manera estricta, bajo la creencia de que “de la muerte del hombre nace el orisha”, expresión que se interpreta con el conocido dicho “el muerto parió al santo”.
Para los Yorubas, la muerte es un concepto muy amplio, con varias interpretaciones, y en cuyo estado se distinguen tres elementos: el espíritu, llamado de Emí; el alma, llamada Orí; y el cuerpo, conocido como Ará. En el equilibrio de la vida, el Emí (espíritu) y el Orí (alma) habitan dentro del Ará (cuerpo), pero a su vez están separados.
A su vez, el Orí puede heredarse, pasar toda la sabiduría y las enseñanzas de las vidas previas a las nuevas encarnaciones, sin embargo, no es descifrable para el común de los hombres sino hasta su muerte. Por ello, con la iniciación religiosa se busca abrir el Orí para que la persona acceda a sus conocimientos previos.
En cuanto al Emí, el espíritu tiene la función de conectar con una conversación interior, guarda los recuerdos de la encarnación y coloca algunos en la parte consciente cuando el devoto consigue montar el Orisha.
Con la muerte, Emí y Orí se convierten en uno solo, y abandonan el Ará; este cuerpo pasa a ser el Okú (cuerpo del muerto). Emí y Orí esperan cual será su destino, si reencarnar (Atunwa), o convertirse en Eggun.
Historia
Eddun significa “hueso o esqueleto”, por tanto es el término que se utiliza para referirse a los “espíritus de los muertos”. Los eggun tienen la facultad de comunicarse con los devotos por medio de sueños u otras revelaciones, así le comunican presagios, advertencias, y le dan intuición sobre lo que le espera en el futuro para que puedan actuar y prevenirlo.
En ocasiones los devotos pueden presentar “malas energías”, y todas las acciones salen contrarias a lo esperado. En estos casos, se consulta a los eggun de protección para saber qué sucede, lo que está influyendo y tener consejos producto de la adivinación.
Culto
El culto a los eggun es definido y organizado entre los devotos yorubas, se trata de una tradición que mantienen el respeto por los espíritus de los difuntos.
En las casas cuando se reciben ceremonias, las primeras se dirigen a los eggun que habitan en esa casa. En la Regla de Ocha de los yorubas, los egguns son de suma importancia para todos los ritos religiosos, al comienzo de estos, se deben invocar los nombres de los eggun (ancestros africanos, nativos, protectores, de otra tribu), existe la expresión “el muerto pare al santo” que indica esta relación fundamental.
Entre las ofrendas se le presentan flores, agua con azúcar, café, tabaco, aguardiente, dulces de coco con miel, y otro tipo de comidas. Es común brindarles de todo lo que se come en casa y los alimentos que disfrutaban cuando estaban encarnados.
Para consultar a los eggun se realiza una misa espiritual donde participa un médium, o a través del oráculo antes de las ceremonias, o en los sacrificios para los orishas. Estos actos de honra y reverencia a los antepasados son bases de la religión africana.
Culto a Eggun femenino
Existen sociedades de culto a eggun femeninos, son conocidas como Iyamí Agbá que significa “mi gran madre”. Se trata de un culto a eggun de modo general.
En el caso de la Sociedad Gelede, el Eggun femenino es Iyami Oxorongá. La sociedad solo acepta mujeres, y son ellas las únicas que manejan este poder. En las ceremonias de países como Nigeria, los hombres se visten de mujeres, llevando máscaras femeninas, para participar de los bailes en su honor y evitar su disgusto. Así se logra un equilibrio entre fuerzas femeninas y masculinas.
Culto a Eggun masculino
El eggun masculino puede ser de culto individual o colectivo. En las sociedades de culto colectivo, está la Sociedad Secreta de Oro, que es la deidad que maneja a los egguns. En las sociedades de culto a egguns masculinos, no se manifiestan las energías femeninas. Los devotos visten trajes de telas coloridas que deben cubrirlos de cabeza hasta los pies. Son trajes especiales que se llaman Eku, en África, y Opá en algunas regiones de América como Bahía en Brasil.