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Santeria Yoruba

Orula

Orisha Orula

Orisha Orula

Orula, Orunmila, u Orunlá son los nombres de este orisha que es una de las deidades más importantes en el panteón yoruba. Según la mitología de esta religión, se trata de un orisha que domina la adivinación y posee la sabiduría.

Orula estuvo en la presencia del poderoso dios Oloddumare cuando se creó el universo, por ello sabe el destino que rige todas las cosas y lo que está por venir. Se consulta a Orula cuando se quiere conocer datos del futuro, bien sea en el plano físico o espiritual, así se conocen las dificultades, amenazas y problemas, y se busca cómo poder librarse de estas.

Orula representa la sabiduría, conocedor de todos los secretos del Ifá. Su función es ayudar al hombre a conseguir el bienestar por medio del conocimiento del futuro con el Ifá. Orula conoce el destino que cada uno escogió antes del nacimiento, así sabe toda la vida de la persona en cualquier punto del tiempo.

Historia

Entre las deidades del panteón yoruba, Orula merece una distinción especial. La mitología dice que Orula fue el primero de los profetas, quien recibió del dios Oloddumare la tarea de contar los nacimientos, las muertes, así como vigilar el desarrollo de los seres humanos y de las demás especies.

Orula recibió el poder de la adivinación y tiene perfecto dominio de los oráculos, es el intérprete del Ifá, ya que visitó la tierra junto a los 16 ancestros Meyi de Ifá, seres celestiales que visitaron la tierra en sus inicios. Su nombre en yoruba significa “el cielo conoce los que se salvarán”.

Los consejos de Orula deben ser recibidos tanto por hombres como por orishas, para que puedan contar con su protección ante los enviados de Eshu, los llamados Osogbos.

Orula es hijo de Obatalá y Yembó, que fueron sus padres ancestrales. Sus padres en la tierra fueron Alayerú y Orokó.

Patakie

Cuenta la historia que Obatalá ordenó matar a todos los hijos varones por el acto de violación de Oggún contra su madre. En ese momento nació Changó, así que Eleguá se lo entregó a Dadá para que lo criara. Poco tiempo después nació Orula al cual Elegba enterraron al pie de una ceiba y todos los días lo alimentaba.

Cuando Obatalá se enfermó, Elegguá buscó a Shangó para que lo sanara, y cuando este lo ayudo, Obatalá le concedió el perdón a todos los hijos. Shangó cortó la ceiba donde estaba Orula le construyó un tablero que entregó para su hermano con los secretos de la adivinación.

Culto

El receptáculo para Orula se trata de una batea de madera, en la que se colocan las dos partes de un güiro que simbolizan el cielo y la tierra. Los atributos que tiene esta deidad son 1 tablilla de cedro, 1 otá, 1 cuerno tallado, 1 rabo de caballo, el rosario de Ifá, el polvo de Orula (yefá), escobilla para limpiar el tablero. Su principal objeto de poder es el tablero de Ifa que se utiliza en las ceremonias y domina el arte de la adivinación.

Los elekes para Orula son hechos de cuentas color verde, combinadas con amarillos. Solamente es impuesto por parte de un sacerdote del Ifa. Si el eleke se rompe, significa un presagio de muerte. Algunas culturas de África utilizan los colores rojo y verde que simbolizan nacer y morir.

En las ceremonias no se realizan bailes para Orula, no obstante se le ofrendan comidas con coco, albahaca, ñame, y animales como la paloma, el venado, chiva, gallina negra. Entre los ewe para Orula están: bejuco de fideo, colonia, corteza de coco, arará, aceitunillo.

Cuando se recibe Orula, debe colocarse en un lugar preciado en la casa, donde no se le moleste. No se debe colocar en cuartos, baños, cocinas, ya que no son dignos de un rey. Se reservan los días 25 de cada mes para su atención, porque dicho día se asocia con el inicio de la luna nueva, en ese momento el devoto debe estar limpio, es decir, sin la menstruación, sin consumir drogas, y en actitud de calma y paz.

Los hijos de Orula son de carácter sereno, sabios y generosos. Tienen el don de la intuición y pueden ser guías espirituales. Se dedican a la introspección y la auto observación.

Ceremonia de la Mano de Orula

Ya que Orula domina el arte de la adivinación y conoce el destino del hombre, durante esta ceremonia se conoce con cuál signo (Odu) el hombre conducirá su vida. Indica problemas, debilidades, fortalezas, prohibiciones, de modo que el devoto pueda vivir aprovechando sus cualidades y perfeccionando su espíritu. En los hombres se llama de Awofakán, mientras que en las mujeres se conoce como Ikofá.

Sincretismo con San Francisco de Asís

Para mantener sus creencias y tradiciones culturales y religiosas africanas, los esclavos traídos al nuevo continente dieron origen al sincretismo, una manera de honrar sus deidades en la figura de santos católicos que tenían similitudes en la historia de vida a las deidades yoruba.

En el caso de Orula, se le ha asociado con la historia de San Francisco de Asís. Este fue un santo de origen italiano, quien vivió durante los años 1181 y 1226. Este santo tuvo una revelación de Jesús que le hizo abandonar su vida común para dedicarse al servicio religioso, profesó  una doctrina de vida austera y humilde, ejemplificando un modelo de caridad, amor al prójimo y a la naturaleza.

Como la misión de Orula es traer bienestar a los hombres, se le ha asociado con este santo. Al ser un orisha adivino, Orula puede guiar a los hombres en su destino a la vida próspera y concederle dones para conocer lo que está por venir y así prevenir el mal. La fecha para celebrarlo es el 4 de octubre.

El Oráculo

Solo elegidos por la ceremonia de la mano de Orula (Awo Fa Ka- hombres, e Iko Fa Fun- mujeres) entran al culto. Las mujeres llevan el nombre de Apetebí, y representa la consagración principal que pueden recibir, mientras que los hombres, pueden ser sacerdotes babalawos consagrados a Orula.

Cuando utilizan el oráculo de Orunmila para la adivinación son conocidos como Oluos o babalaos, que pueden ser hijos de otros orishas y bajo el permiso de sus deidades principales, adoptan el camino del Ifa. El devoto debe ser un hombre perfecto moralmente y responsable, no debe recibir muertos ni ser médium, además, el padrino debe corroborar sus condiciones para ser babalawo. Tiene que estudiar todos los secretos del cuerpo del Ifa para poder conocerlos y explicarlos.

“El tablero de Ifá”, llamado até es una representación del mundo, y es uno de los atributos de los babalawos.

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